Se ha puesto de moda reducirlo todo a su equivalente en terrones de azúcar, pero si todo lo reducimos a equivalencias en terrones de azúcar ( incluyendo los azúcares propios del alimento) no tardará mucho tiempo en que ciertas personas calculen y digan «si un zumo de dos naranjas son x terrones de azúcar, comerse 2 naranjas o tres mandarinas o una manzana serán x terrones». Es muy preferible tomar fruta entera que el zumo y tomar grandes dosis de zumo ( como ocurre en países como USA donde a veces se sustituye el agua por zumo) es un error que puede provocar un incremento de peso pero decir que un vaso de zumo es insano y relacionar un vasito de zumo diario con exceso de peso y decir que es lo mismo que un refresco con sacarosa ( sin tener en cuenta otros aspectos de la matriz) es un error. Obviamente la matriz en la que se encuentra la fructosa es diferente en la fruta que en el zumo ( entre otras cosas en el zumo la cantidad de fibra es mucho menor) pero decir que incluir un vasito de zumo de naranja natural sin azúcar añadido en el desayuno es un error nutricional y un hábito insano no sólo es SENSACIONALISMO sino una autentica tomadura de pelo y compararlo con un cigarrillo o un ron es «terrorismo nutricional».
Se debe fomentar el consumo de fruta entera, se debe recordar que el agua debe ser el líquido de elección y se debe insistir en que no se debe abusar de bebidas azucaradas incluyendo zumos pero decir que tomarse un vasito de zumo de granada ( por hablar de una fruta que cada vez se toma más en zumo) al día es igual que tomarse un refresco sin pizca de fruta y cargado de aditivos y azúcar y que es un error nutricional , un mal hábito, y que puede tener efectos nocivos para la salud ( ¡¡ un vasito al día!!) es de «juzgado de guardia».
No se puede reducir el zumo sin azúcar añadido a su equivalente en azucarillos. La matriz en la que se encuentra esa fructosa importa. De hecho existen estudios con ingesta de zumos a dosis no precisamente mínimas ( por ejemplo con zumo de uva) y a diario y se ha visto que no influye en el peso y sí revierte en beneficios.
