Hace ya tiempo que diferentes estudios relacionan el elevado consumo de carne roja con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, metabólica y cáncer. Respecto al cáncer, algunas hipótesis sugerían varios factores como su riqueza en grasas saturadas, hierro etc… Sin embargo el consumo de pollo y pavo ( por ejemplo) no se relacionaba con un incremento en el riesgo de dichas enfermedades.
Pues bien, recientemente se ha publicado un interesante artículo científico (*), del que me enteré gracias a que el Doctor Rafael Urrialde lo enlazó en su muro, que aborda el tema de carne y cáncer y curiosamente lo hace desde un punto de vista evolutivo. Parece que hace aproximadamente unos dos millones de años, nuestros ancestros padecieron una mutación ( en el gen CMAH que se inactivó) que no tuvieron los otros primates y que si bien en algunos aspectos significó una serie de ventajas evolutivas ( por ejemplo protección frente a algunos tipos de malaria) pero también provocó que el consumo de carne roja incrementase el riesgo de cáncer.
El gen CMAH se caracteriza porque permite la síntesis de un azúcar concreto, el llamado Neu5Gc. Dicho azúcar se encuentra en fuentes animales, siendo la carne roja (aunque también hay algunos pescados que lo aportan) una fuente significativa. Pues bien, como consecuencia de la mutación que provocó la inactivación del gen CMAH este azúcar comenzó a ser extraño para nuestro organismo originándose cuando estamos expuestos a él ( como ya no lo producimos nos exponemos como consecuencia de alimentos que lo contienen ) una respuesta inmune que origina una respuesta inflamatoria que puede derivar en ciertas consecuencias, entre ellas en un mayor riesgo de cáncer.
El pollo y el pavo carecen del gen CMAH y por tanto no expresan este azúcar Neu5Gc y curiosamente los estudios no relacionan el consumo de carne de pollo y pavo con más riesgo de cáncer. La carne roja sí tiene el azúcar Neu5Gc y su consumo habitual sí incrementa el riesgo de cáncer ( especialmente colorrectal), por ello esta hipótesis da una explicación plausible al por qué el consumo de carne roja puede incrementar el riesgo de cáncer y se debe limitar.
(*) Sateesh Peri, Asmita Kulkarni, Felix Feyertag, Patricia M. Berninsone, David Alvarez-Ponce. “Phylogenetic distribution of CMP-Neu5Ac hydroxylase (CMAH), the enzyme synthetizing the pro-inflammatory human xeno-antigen Neu5Gc”. Genome Biology and Evolution, 30 de noviembre de 2017. https://doi.org/10.1093/gbe/evx251
Hola…muy interesante esté tema, justamente leí una publicación sobre la razón, el porque no se habla de cáncer al corazón.
Descargué un documento del link qué está al final, solo me lleva a un documento de una sola.página…solo un título…será posible qué tengas el enlace del artículo?, desde ya muchas gracias!
Aquí lo puedes checar Isabel goo.gl/uMb38E
Muy interesante, gracias
Gracias por leerlo. Gracias a través de Pubmed. Saludos
[…] Enlace: https://ramondecangas.com/carne-roja-cancer-hipotesis-evolutiva/ […]
Interesante, gracias
Desde hace tiempo he reducido el consumo de carne roja, en especial pq mi genética no es alentadora con respecto al cáncer. Ahora, de lo malo algo bueno. En Venezuela la carne se ha puesto taaaaan costosa q ya c
asi no la consumo. No hay mal q por bien no venga.
así es, saludos